Hobbit, una película que cuenta la historia del tío de Frodo, el pequeño Bilbo Bolson, y como se une a una aventura. Me llamo mucho la atención a tema de reflexión que muchas veces nos volvemos cómodos acostumbrados a la rutina, un horario, nuestro día a día... Rutina... la que nos da una especie de sensación de "seguridad".
El pequeño Bolson dejo a un lado su comodidad para aventurarse con Grandalf el Mago, y sus amigos enanos. Vivió momentos de stress, incomodidad puesto que no estaba en su espacio de confort ni en su casa en la comarca, mas bien era un nómada aventurero viajando y transitando caminos que nunca se imagino. Esos caminos y esas experiencias le dieron mucho que aprender, aveces paso sus sustos, y enfrento miedos que no sabia que tenia; pero valió la pena. Y esa sensación de gratificación es tan especial, y tan única que son los recuerdos que tanto añoras en la vejez de la vida.
Aveces es eso lo que necesitamos... momentos de aventura, donde rompamos la rutina, abriéndonos a nuevos caminos, nuevas experiencias, conocer mas allá de lo que conocemos, porque hay un mundo afuera lleno de horcos, elfos, enanos, hobbits, magos, magia, belleza, y aprendizaje... que espera ser conocido.